En el Día Internacional de las Personas con Discapacidad, nos sumamos al reconocimiento de la lucha por la igualdad de oportunidades y el acceso equitativo a la educación, el empleo y los servicios, subrayando la importancia de políticas inclusivas que fomenten la plena integración y la participación activa en la sociedad. A medida que conmemoramos este día, también celebramos los avances logrados y nos comprometemos a seguir construyendo un mundo más justo, accesible y comprensivo para todos.

Contexto

Durante las últimas décadas, el ámbito europeo ha sido testigo de una evolución notable en la promoción de los derechos y la inclusión de las personas con discapacidad. Desde la aprobación de legislaciones pioneras hasta los avances en políticas de inclusión y oportunidades, Europa ha liderado diversos esfuerzos para garantizar la igualdad y la dignidad de un colectivo que, según datos del Parlamento Europeo, representa 87 millones de europeos.

Sin dejar a nadie atrás

La justicia social es el eje central de la economía social de mercado europea, cimentando la idea de que la equidad y la prosperidad son fundamentales para construir una sociedad sólida y resiliente, reflejando así la ambición de Europa de cumplir plenamente los Objetivos de Desarrollo Sostenible de las Naciones Unidas. En la actualidad, Europa es un espacio único donde la prosperidad, la equidad y un futuro sostenible son metas igualmente prioritarias. 

Todos los europeos merecen igualdad de oportunidades para progresar. Es crucial preservar, adaptar y mejorar lo que han construido las generaciones anteriores. Pero no todas las personas disfrutan de estos avances por igual. Un ejemplo lo encontramos en el ámbito laboral, siendo la tasa de empleo de las personas con discapacidad (de 20 a 64 años) del 50,8%, en comparación con el 75% de las personas sin discapacidad.  

Desafíos como éste afectan a todos los países y a todos los europeos. Es pertinente abordarlos juntos y afrontar el cambio de manera proactiva. El Pilar Europeo de Derechos Sociales representa la respuesta europea a estas aspiraciones fundamentales. Es nuestra estrategia para asegurar que las transiciones hacia la neutralidad climática, la digitalización y el cambio demográfico sean justas y equitativas.

La inclusión de las personas con discapacidad es un aspecto fundamental para ello. A pesar de los avances en la concienciación y la legislación que protege sus derechos, las personas con discapacidad a menudo se enfrentan a barreras para acceder a la educación, el empleo, la atención médica, los espacios públicos y la participación plena en la vida comunitaria. La sensibilización y la promoción de la accesibilidad son pasos clave para crear entornos más inclusivos y equitativos para las personas con discapacidad. Adaptar infraestructuras, programas educativos y oportunidades laborales, además de fomentar una mayor comprensión y apoyo de la comunidad, son aspectos fundamentales para crear sociedades más inclusivas y respetuosas con la diversidad.

La Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible de las Naciones Unidas, adoptada en 2015, ha reforzado el compromiso global con la inclusión. La discapacidad se aborda explícitamente en varios de los ODS, destacando la importancia de no dejar a nadie atrás. Este enfoque holístico refleja un cambio de paradigma, reconociendo que el desarrollo sostenible solo es posible si incluye a todas las personas, independientemente de sus capacidades. Recordemos además la Convención sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad de la ONU, tratado internacional que protege los derechos y la dignidad de las personas con discapacidad. Ratificada por numerosos países, establece estándares para garantizar la igualdad de oportunidades y la plena participación en la sociedad para las personas con discapacidad.

Con la mirada al futuro 

El tejido empresarial ha reconocido progresivamente la importancia de la inclusión laboral como pilar de la sostenibilidad. En este contexto, la baja tasa de empleo de personas con discapacidad ha llevado a replantear estrategias y a desarrollar iniciativas que buscan integrar eficazmente este segmento en el mercado laboral, encontrando en los "green jobs" una puerta abierta hacia la equidad y la diversidad.

Green Jobs

Con el Pacto Verde Europeo, Europa ha trazado su camino hacia convertirse en el primer continente neutro en carbono para el 2050. Esta ambiciosa estrategia de crecimiento implica la creación de nuevos negocios, empleos y mayores inversiones. Su éxito asegurará que Europa mantenga su liderazgo en sistemas de bienestar avanzados, sea un centro dinámico de innovación y emprendimiento competitivo, y promueva la convergencia ascendente, la equidad social y la prosperidad compartida.

Recientemente, en la 10ª Conferencia Mundial Anual de la Red Mundial de Empresas y Discapacidad de la OIT (GBDN de la OIT), Fundación ONCE y la OIT presentaron el informe "Making the Green Transition Inclusive for Persons with Disabilities". Este documento, desarrollado bajo el marco del proyecto Disability Hub Europe y financiado por el Fondo Social Europeo, arroja luz sobre los cambios en el ámbito laboral en respuesta a los impactos del cambio climático, con un enfoque especial en la inclusión de personas con discapacidad: la transición hacia la sostenibilidad ecológica no solo generará empleo en diversos sectores económicos, sino que también transformará y eliminará roles laborales, presentando tanto oportunidades como desafíos para aquellos en riesgo de exclusión, incluyendo a las personas con discapacidad. Esta transición, además de ser ambiental, tiene un impacto social y económico significativo, evidenciando la necesidad de adaptar políticas y estrategias para garantizar una participación justa e inclusiva para todos los grupos, particularmente aquellos históricamente marginados.

El informe identifica que las personas con discapacidad pueden estar entre las más afectadas por el cambio climático debido a la limitación en el acceso a recursos, al mismo tiempo que pueden ser las primeras en sufrir los efectos negativos de la transformación económica para cumplir con objetivos medioambientales. Sin embargo, suelen ser pasadas por alto en el desarrollo de políticas públicas en respuesta a estos desafíos.

Para lograr una transición justa y equitativa, se necesitan programas de formación inclusivos y adaptados a las necesidades específicas de las personas con discapacidad. El diálogo social con estos grupos debe ser una prioridad en la formulación de políticas, asegurando la incorporación de la accesibilidad en el proceso de transición hacia una economía y sistemas de protección social más ecológicos.

La inclusión en los informes de sostenibilidad: un nuevo horizonte para la Ddiscapacidad

La nueva Directiva Europea de Informes de Sostenibilidad Corporativa (CSRD) marca un hito al fortalecer el enfoque en los derechos humanos, particularmente en la inclusión laboral de personas con discapacidad. A partir de 2024, se insta a alrededor de 50.000 empresas en la Unión Europea a incluir indicadores clave relacionados con la igualdad, empleo e inclusión de personas con discapacidad en sus informes de sostenibilidad. Se requiere la presentación de estos informes por parte de entidades de interés público y empresas con más de 500 empleados en 2025, y para aquellas con más de 250 empleados que cumplen con los criterios de la Ley 11/2018, el plazo se extiende hasta 2026.

Los Estándares Europeos de Informes de Sostenibilidad (ESRS) facilitarán la visibilidad de la discapacidad y la no discriminación, pues  establecen una serie de indicadores específicos que deben incorporarse para cumplir con la Directiva Europea:

-Porcentaje de personas con discapacidad desglosado por género.

- Medidas adoptadas para fomentar y gestionar la inclusión de personas con discapacidad, destacando la aplicación y los resultados alcanzados durante el periodo informado.

- En ausencia de políticas, se debe proporcionar una justificación correspondiente.

- Número de incidentes de discriminación en el trabajo por motivos de discapacidad, con detalles sobre las medidas adoptadas y las sanciones aplicadas, si las hubiera.

Asimismo, el 13 de junio de 2023, Disability Hub Europe lanzó una guía actualizada, "Discapacidad en los Informes de Sostenibilidad", con el objetivo de impulsar con mayor ambición la inclusión de personas con discapacidad en el entorno laboral. Esta guía, resultado del esfuerzo colaborativo entre la Iniciativa Global de Reporte (GRI) y la Fundación ONCE, representa una herramienta útil para las organizaciones al comunicar su compromiso con los derechos de las personas con discapacidad.

La actualización de la guía se basa en las Normas Universales actualizadas de GRI, junto con las normativas de informes relacionadas con áreas específicas, permitiendo a las organizaciones maximizar el potencial de GRI para fomentar la inclusión de personas con discapacidad en todas sus operaciones y con sus partes interesadas.

En vista de estos requisitos, se recomienda a las organizaciones abordar la inclusión de personas con discapacidad no sólo como un mandato legal, sino como una estrategia de sostenibilidad integral. Esto implica desarrollar políticas de no discriminación, contar con canales éticos para identificar y gestionar incidentes de discriminación por discapacidad, y establecer mecanismos para medir y fomentar la diversidad en la organización.